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África.- La hija de un líder musulmán en una aldea en Etiopía, desapareció de manera repentina. De manera desesperada, se acerco a un misionero cristiano al que había expulsado varias veces del pueblo. El líder declaró que si Jesús le devolvía a la niña, se vuelva a los caminos de Jesús. El misionero intercedió ante Dios por él, la niña apareció y todos en la aldea, sorprendidos por el milagro, aceptaron a Jesús en sus vidas.

Conforme al comunicado por God Reports, un evangelista local, capacitado por Living Water International para predicar el evangelio de Jesucristo a los musulmanes, informó que regresó a un pueblo musulmán en el país africano, donde había sido expulsado varias veces. Pero esta vez, gracias al entrenamiento, pudo anunciar las Buenas Nuevas y hablar con la gente de la tribu.

Luego de escuchar las historias bíblicas del evangelista, el jefe de la aldea, que también era un imán (sacerdote) musulmán, preguntó: “¿Puede Jesús todavía hacer milagros hoy?” Y el predicador respondió: “Sí, sí puede”. Entonces el jefe le dijo que su hija de 10 años estaba desaparecida desde hacía varios días. Desesperado, el líder dijo que si Jesús le devolvía a la niña, se convertiría en su seguidor.

El evangelista clamo a Dios con el jefe y su familia para que su hija se encontrara a salvo. Al día siguiente, la niña fue encontrada y devuelta sana y salva a casa.

Por otra parte, como prometió, el líder abandonó por completo el islam y entregó su vida a Cristo, así como a toda su familia. Todo el pueblo fue convertido y transformado por el Evangelio.

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