Luego de más de cinco pulgadas de lluvia -de forma generalizada- que cayeron en menos de 12 horas, varios municipios en la mitad este de la isla registraron múltiples deslizamientos, inundaciones y comunidades afectadas por la pérdida de agua potable y energía eléctrica.

Los aguaceros y las tronadas intensas fueron influenciados por la vaguada en niveles altos de la atmósfera que prevalece sobre La Española, sumado a la humedad que está en la región local. Distinto a una alta presión, una vaguada es un sistema de baja presión -sin circulación cerrada- que induce inestabilidad atmosférica suficiente como para permitir convección (desarrollo de amplias nubes con tronadas) significativa.

Por tratarse de una baja presión sin centro de circulación o un eje (como los ciclones tropicales), la predicción de lluvias vinculadas a este tipo de evento siempre acumula un alto margen de error, debido a la incertidumbre entre los principales modelos globales.

En concreto, los pueblos con mayores estragos tras las lluvias, al momento, fueron San Lorenzo y Gurabo, cuya región acumuló la mayor cantidad de agua. Hasta las 6:00 a.m. de este sábado, el radar Doppler estimaba entre 6 a 10 pulgadas la lluvia acumulada en dicha área, según el Servicio Nacional de Meteorología (SNM) en San Juan.

El Nuevo Día conversó con los alcaldes de algunos de los pueblos con más emergencias registradas y a continuación compartimos los detalles.

San Lorenzo

El alcalde Jaime Alverio Ramos detalló que “cuatro a cinco” familias quedaron incomunicadas luego de que un puente en el camino 916 en el sector Acueductos, del barrio Cerro Gordo, colapsó.

Asimismo, informó que un anciano de 90 años perdió la mayoría de sus pertenencias luego de que su casa, ubicada en San Lorenzo Valley, se inundó por completo. “Lamentablemente, explotó un tipo de dique en la parte de atrás de su casa”, comentó el funcionario.

Además, al momento de esta publicación, un derrumbe mantenía cerrado el tránsito en la PR-913 en este pueblo.

Gurabo

Decenas de familias residentes en Gurabo perdieron los servicios de agua y luz tras un complejo derrumbe en la PR-181, sector Los Corsinos, que provocó la rotura de una tubería y cables del tendido eléctrico.

Según los estimados de la alcaldesa, Rosachely Rivera Santana, unas 10 familias permanecerán sin energía eléctrica y otras 100 a 150 carecerán de agua potable.

“LUMA pudo cortar los cables para no tener el tendido eléctrico vivo en el área, para evitar alguna situación de peligro. Acueductos estará ya en el día de mañana la instalación de la tubería nueva para esa área porque se desprendió toda esa tubería”, explicó la ejecutiva municipal, al detallar que se desconoce cuándo se restablecerán las utilidades a las comunidades afectadas.

De otra parte, explicó que el Departamento de Transportación y Obras Públicas les está enviando unas vayas de cemento para cercar el área y evitar accidentes. Con estos módulos, esperan habilitar un carril en el kilómetro 50.4, donde ubica el deslizamiento.

Mencionó, también, que unidades del municipio abrieron paso en la PR-181, a la altura del barrio Jaguas, por otro derrumbe.

Asimismo, Rivera Santana sostuvo que el personal municipal ha atendido tres casos individuales de residencias afectadas por deslizamiento de tierra. “Estamos atendiendo todos los casos que podemos para que la gente pueda sentirse segura en sus hogares, dentro de la medida que se pueda”, subrayó la alcaldesa.

Las personas afectadas en Gurabo, pueden comunicase con el ayuntamiento municipal al 787-712-2013.

Mientras, la carretera 941 fue cerrada en la mañana por inundaciones que afectaron el río Gurabo, pero fue reabierta después de mediodía tras verificar que el río estuviese estable.

Loíza

El súbito aumento del caudal del río Grande de Loíza provocó que el agua desbordada inundara el casco urbano del pueblo, según la alcaldesa, Julia Nazario.

Pese a que ya las inundaciones han sido mitigadas, la alcaldesa indicó que el río dejó a su paso mucho sedimento que será removido a partir del lunes. “Todo lo que trae el río se quedó estacionado allí (en el casco urbano)”, explicó la alcaldesa.

Aunque dos compuertas de la represa del lago Carraízo se abrieron esta mañana, la alcaldesa afirmó que entienden que el flujo de esa agua no fue el detonante de la inundación en el pueblo. “Entiendo que el río se salió no por la apertura de las compuertas, sino por la cantidad de lluvia que ha caído”, sostuvo.

De otra parte, Nazario indicó que una inundación en la comunidad de Villa Batata, que es susceptible a las inundaciones, también fue trabajada con una bomba para la extracción del agua.

Más temprano, las autoridades loiceñas tuvieron a tres personas refugiadas, dos con familiares y una en el Centro de Servicios del municipio. No obstante, ya todas las personas están de vuelta en sus hogares. “Afortunadamente ya no tenemos refugiados y el agua no entró a ninguna casa”, informó Nazario.

Parte de las comunidades afectadas por inundaciones fueron: Los Vizcarrondo, Villa Batata, Las Cuevas y unas “pocas casas afectadas en el sector Melilla”, según la funcionaria.

Guayama

El alcalde de este pueblo, O’brain Vázquez Molina, resaltó que unas cinco calles de la urbanización Villa Real se inundaron por completo tras una falla en el sistema pluvial de esa zona.

“Esta urbanización colinda con Arroyo y hay unos problemas de construcción que llevan muchos años que provocan que las aguas no fluyan correctamente por el sistema pluvial y eso provoca que cuatro a cinco calles se inunden por completo. Como las lluvias han sido tan fuertes, se ha inundado más de lo normal, de lo que ya se estaba inundando”, describió el funcionario, al tiempo en que indicó que existe un proceso paralelo de cotizaciones para realizar un proyecto de mitigación a futuro, en esta área.

A través de un sistema de bombas, se logró extraer el agua que afectó a unas cuatro o cinco calles de la mencionada urbanización. El trabajo contó con la colaboración del Negociado del Cuerpo de Bomberos y del Municipio de Arroyo, que prestó una de las bombas utilizadas.

En el municipio, se vieron afectadas cinco residencias, en las que hubo pérdidas mayores. El Departamento de la Familia, junto a la Oficina de Ayuda al Ciudadano, ha visitado a cuatro familias afectadas.

Dos de las propiedades afectadas ubican en la urbanización Villa Real. Mientras, otras dos están en la comunidad Santa Ana y una en Miramar. En estas últimas, donde entró agua, vivían adultos mayores.

Al momento de la publicación, Vázquez Molina iba en camino a la carretera PR-15, donde se reportó un deslizamiento de terreno que, de momento, no requería el cierre de la vía. Sin embargo, se evaluará se requiere algún tipo de señalización para evitar accidentes, particularmente en horas de la noche.

Asimismo, dijo que en algunos segmentos de la PR-3 se cerró el acceso al tránsito por inundaciones, pero la situación ya era atendida al momento de esta publicación.

Compartió que los residentes que necesiten reportar alguna emergencia por estas lluvias pueden llamar a la Oficina Municipal de Manejo de Emergencias (OMME) al (787) 864-1946.

Río Grande

Si bien el municipio atendía múltiples acumulaciones de agua en alcantarillas, el alcalde, Ángel “Bori” González Damutd, indicó que el problema mayor era las interrupciones constantes de agua y luz en múltiples comunidades.

“Tenemos muchas interrupciones de luz en algunas comunidades y agua con turbidez”, destacó acerca de una de las situaciones con el agua potable. Indicó, asimismo, que vigilaban los cuerpos de agua, ante la cantidad de escorrentías que se estaban registrando.

“Desde ayer tenemos personal revisando y destapando alcantarillas. Eso ha sido clave porque ha sido mucha lluvia, por lo menos particularmente el día de hoy. Personal de Manejo de Emergencias está activo”, aseguró.

González Damutd informó que los números a llamar en caso de emergencias en este pueblo son: (787) 888-5590 y (787) 887-5715.

Arroyo

Aunque a primeras horas registraron múltiples inundaciones, el alcalde, Eric Enrique Bachier Román, aseguró que mantuvieron la situación “en control”.

“Tuvimos dificultad con la PR-3 que es la que da acceso de Arroyo a Patillas y de Patillas a Guayama. Tuvimos que cerrar temporeramente esa ruta, pero está abierta nuevamente. Tuvimos inundaciones temporeras por la cantidad de lluvia que cayó, pero está poco a poco volviendo a la normalidad”, puntualizó.

En lo que respecta a las condiciones durante el fin de semana, se espera que la vaguada se debilite durante las próximas 24 horas, por lo que la actividad de lluvia deberá disminuir gradualmente.

No obstante, quedarán suficientes factores en la región como para potenciar algunas interrupciones de lluvias durante todo el fin de semana, pero serían de menor intensidad a lo que ha experimentado Puerto Rico en los pasados días.

A partir de mañana, domingo, también se espera la llegada de una masa de aire más seco con polvo del Sahara, por lo que el patrón del tiempo deberá ser más seco y estable para inicios de la próxima semana laboral.