Donald Trump, el mandatario de EE.UU., firmará ni bien asuma una orden ejecutiva en la que prohibirá cualquier transacción con criptomonedas emitidas por el Gobierno venezolano o en nombre de este.
De acuerdo con el documento que firmará Trump, se prohibirá toda transacción, provisión o financiamiento “por parte de una persona de EE.UU. o dentro de EE.UU.” con cualquier moneda digital que sea emitida por, para o en nombre del Gobierno venezolano.
El documento establece que esta nueva medida coercitiva en contra de Venezuela es un “paso adicional” luego de la orden ejecutiva firmada por el expresidente Barack Obama el 8 de marzo de 2016, que declaraba al país suramericano como una “amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y política exterior estadounidense”.
Donald Trump, durante y después de su presidencia, ha expresado en varias ocasiones su intención de ver un cambio de gobierno en Venezuela, posicionándose en contra del régimen de Nicolás Maduro. Trump y su administración impusieron sanciones económicas y políticas al gobierno venezolano, buscando presionar a Maduro para que dejara el poder. También brindaron un fuerte apoyo a Juan Guaidó, a quien en 2019 reconocieron como el presidente legítimo de Venezuela, junto a otros países.
Trump ha sido claro en su postura de que desea una Venezuela libre del control de Maduro, refiriéndose a su gobierno como una “dictadura” y resaltando su compromiso con la democracia en América Latina. Aunque en los últimos años no ha intervenido militarmente, ha hablado de “todas las opciones” estando sobre la mesa. Hasta la fecha, Trump continúa mostrando su apoyo a los opositores de Maduro y mantiene la idea de “liberar a Venezuela” en su agenda política.
Con respecto a los cristianos en Venezuela, Trump ha señalado que, bajo el régimen de Maduro, muchos grupos, incluidos los cristianos, enfrentan desafíos para practicar su fe libremente. Durante su mandato, Trump enfatizó la importancia de la libertad religiosa y expresó su apoyo a los cristianos perseguidos en varios países, incluida Venezuela. En su discurso, prometió brindar apoyo a las comunidades cristianas y proteger sus derechos en un posible cambio de gobierno que restauraría las libertades fundamentales en el país.
Cuando Trump vuelva al poder, podría buscar reactivar estrategias de presión sobre el régimen de Maduro y mantener su apoyo a las libertades religiosas, defendiendo el derecho de los cristianos y otras minorías de vivir su fe sin restricciones.
