– Anuncio –
Definitivamente que las redes sociales han revolucionado la forma en que vivimos y pensamos, sin embargo ¿Qué tan beneficioso es para los que están en Jesucristo? Las redes sociales son una plataforma efectiva para la difusión del evangelio.
Honestamente tenemos que pasar más tiempo en el crecimiento espiritual. Ya que pasar el tiempo en ver imágenes o informaciones que no nos edifican es perder el tiempo, de hecho es un territorio peligroso para los cristianos. Porque convierte la mente en una llanura abierta, con el enemigo merodeando por la hierba como león, esperando para devorar (1 Pedro 5: 8)
Existen cuatro formas que el enemigo intenta devorarnos por medio de las redes sociales:
1- El enemigo quiere tu matrimonio: Todo comienza con un yo gusta aquí otro por allá, ella es solo mi amiga comienza a justificar la interacción inocente del botón ya que no cruza ninguna línea solida. Después de poco a poco la línea se va cruzando sin darse cuenta. Probablemente los "me gusta" y los comentarios los llevan a conversaciones privadas. No podemos olvidar que el pecado, no se satisface con lo que tiene.
Proporcionar el acceso a su cónyuge de sus redes sociales, ya que estará menos tentado a esconder cualquier cosa.
2- El maligno quiere tus pensamientos puros: Si luchas contra el pecado de la lujuria, tomate un descanso de las redes sociales y si es posible que sea definitivo. Ya que tu relación con Dios es mucho más importante que el Facebook.
Mateo 5: 8 nos dice: “que los puros de corazón verán a Dios!”, Conserve su corazón puro y fijo en Dios, elimine todo lo que pueda obstaculizar eso.
1 Pedro 4: 7 nos relata: “El fin de todas las cosas está cerca, por lo tanto; sean auto controlados y sobrios por el bien de sus oraciones ”.
3- El enemigo quiere tu tiempo: Las redes sociales son una herramienta bastante efectiva para el maligno, porque captara tu atención y afecto de parte de Dios. A decir verdad estamos escogiendo los placeres de este mundo en vez de pasar tiempo con Dios, es así de sencillo. Aléjate del ruido de las noticias que el enemigo usa para pescar tu mente.
Salmos 19: 14 indica que "Sean gratos ante tus ojos las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón, oh Señor roca mía y mi Redentor".
4- El maligno quiere tu adoración: Curiosamente las redes sociales nos entrenan para adorar al ídolo del yo de una manera sutil e introvertida, es decir creamos mini santuarios de nosotros mismos, el enemigo quiere que los enfoques en ti mismo, que tu fuente de autoestima este en la alabanza vacía y la atención de los demás, y no en la sangre expiatoria de Jesús. No podemos ser egocéntricos y tener compasión con los demás.
Filipenses 2: 3 expresa lo siguiente: "No hagan nada por egoísmo o por vanidad vacía, pero con humildad de gente, consideren los demás como más importantes que ustedes mismos".
– Anuncio –
