El antipentecostalismo en las redes sociales
A ver, soy Bautista pero me sorprende tanto el odio, el ego extremo y la apologebasura que muchos neocalvinistas están promoviendo que a veces me pregunto, ¿y dónde están los pastores de estas personas? Algunos de estos hipócritas ni siquiera se congregan en una iglesia local y otros asisten a iglesias pentecostales pero en las redes sociales son “reformados”. Esta claro que estos influencers (como Edgar Pacheco, Wiunston Medina, David Ivan Tavilo y su compañía) solo buscan ser controvertidos haciendo spams, troleando y peleando en debates solo para buscar una reacción ya sea buena o mala. Tratan de darse a conocer pero de la manera equivocada y todo por dinero. Viven para discutir y para conseguir más seguidores. Sin embargo, Jesús y sus apóstoles condenaron este tipo de “cristianismo” tóxico y narcisista lo cual es típico en neocalvinistas (Mateo 5:29 y Romanos 12:18-19). Esto no ayuda a la apologética cristiana y mucho menos a ganar almas para Cristo. Al contrario, la mala actitud de estos falsos maestros hace que las personas se alejen de la Verdad de Dios. Mi consejo para los apologistas evangélicos es que no le den plataforma a un grupito de personas que pretende ser nuestro magisterio y que solo buscan contender o proselitar a otros porque creen tener más formación teológica y filosófica que ustedes cuando en realidad no tienen nada (1 Corintios 13:2).
¿Te gusta los debates? Entonces “que con mansedumbre corrija a los que se oponen” (2 Timoteo 2:25-26). Aprenda a respetar, cuide su tono de voz y no ande antagonizando a otros pues "si alguno quiere ser contencioso, nosotros no tenemos tal costumbre, ni las iglesias de Dios." (1 Corintios 11:16). Preocupémonos más de nuestra relación personal con Dios y de la gente que vive bajo nuestro propio techo que de un extraño con problemas emocionales. En fin, si un cristiano vanaglorioso y jactansioso busca pleitos contigo simplemente ignóralo y no alimentes al Troll o seguirán portándose peor que un ateo militante. Como dijo el Maestro, “No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, y se vuelvan y os despedacen” (Mateo 7:6), saludos.