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El testimonio de vida de Shane Fore, un plantador de iglesias de Arkansas, ilustra cómo la gracia de Dios puede transformar a una persona de maneras extraordinarias. Era traficante de metanfetamina y su matrimonio estaba al borde del divorcio cuando tuvo un encuentro radical con Dios.

Fore ahora dirige Stepping Stone Sanctuary, un refugio para personas sin hogar en Trumann, Ark., y dirige el ministerio Celebrate Recovery en Maple Grove Baptist Church. También ayuda a otras iglesias locales a iniciar sus propios programas de recuperación.

Fore reflexionó sobre la gracia de Dios durante un reciente viaje a casa y cómo un encuentro con Jesucristo cambió su vida.

Él dijo: “Hoy vuelvo a casa, y Dios ha plantado una iglesia a través de nosotros… cientos de personas tienen fe en Cristo a través de nuestro ministerio. Tenemos un próspero ministerio Celebra la Recuperación, un ministerio de prisiones, una despensa de alimentos y un refugio para personas sin hogar. Y estoy mirando esta misma torre de agua. La misma torre de agua y el mismo tipo, y un encuentro con Jesucristo cambió todo eso”.

Fore está agradecido por los grupos de recuperación de adicciones y cree que ayudan a las personas a desbloquear su adicción y responder de manera saludable. Él cree que estar ahí para las personas cuando las cosas van mal es un momento ideal para compartir a Jesús.

El camino de la plantación de iglesias y el ministerio de recuperación no ha sido fácil para Shane y su esposa April. A menudo se turnaban para vivir con sus padres mientras su relación estaba en las rocas.

Sin embargo, después de ser salvos, se unieron a una iglesia local y comenzaron a estudiar la Biblia frecuentemente con otros creyentes. Fore dijo que pronto sintió un llamado a plantar iglesias. Fue enviado a Trumann con el apoyo de su iglesia y desde entonces ha trabajado incansablemente para ayudar a los necesitados de su comunidad.

Fore dijo que en su vida de adicción, el orgullo provenía de estar con alguien por primera vez que estaba drogado o borracho. Cuando se entregó a Cristo, se dio cuenta de que necesitaba un cambio en su vida.

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“Me di cuenta de que mi problema no era una lista de pecados, sino una naturaleza pecaminosa. Sabía que necesitaba un cambio en mi vida, y todo lo que Dios tenía para ofrecer era mejor que mi vida”, dijo.

Shane ahora dedica su vida a ayudar a los necesitados y llevar el mensaje de Cristo a todos los que conoce.

Fuente: Gospelprime

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