Granizo y tormentas muy intensas paralizan a Turquía

Desde la semana pasada, un vórtice frío en niveles medios-altos de la tropósfera, junto con la corriente en chorro y humedad en la región, detonó la formación de extensas zonas con lluvias/tormentas, que fueron aumentando en intensidad, al grado de dejar incomunicados varios sectores por la acumulación de la misma lluvia y el granizo.

En Adana, al sur de Turquía, fue una de las ciudades con más efectos adversos, reportándose inundaciones en una vasta extensión dejando atrapados miles de automóviles en vialidades, además de haberse generado corrientes importantes de agua que arrastraron varios objetos. En algunos puntos, esto se mezcló con el granizo que precipitó, haciendo que los daños se incrementarán en la población que se vio vulnerable.

Severas granizadas e inundaciones afectan a la población

Sobre varios puntos del Río Éufrates, la tormenta se tornó más severa, dando como resultado granizo grande, generando un espectáculo único. En la misma ciudad de Adana, la granizada dejó cubiertos varios automóviles, y a otros simplemente les fue imposible poder circular en las calles; sin embargo, no fue del todo malo ya que en algunos puntos resultó en momentos de diversión para niños y adultos que pudieron jugar y hacer “muñecos de nieve”.

En la ciudad de Estambul, la densa nubosidad asociada a grandes desarrollos de Cumulonimbus ocasionó que en cuestión de minutos se oscureciera como si fuera la medianoche, sorprendiendo a la población. Todas estas lluvias resultan muy benéficas para el entorno, no obstante, los modelos de pronóstico están sugiriendo que esta última semana de abril y la primera de mayo se presenten más perturbaciones atmosféricas con masas polares que resulten en más lluvias, nevadas y granizadas.