Quien quiera servirme, debe seguirme; y donde yo esté, allí también estará mi siervo. A quien me sirva, mi Padre lo honrará. Juan 12:26
Amado Padre que estás en el cielo, te damos gracias por este día y por la protección que nos has dado. Concede que encontremos nuestra alegría en tu gracia y en tu amor. Ayúdanos a ser fieles seguidores de Jesús, quien vino en tu amor. Ten misericordia de nosotros y ayuda a todos los que te pertenecen. Tú los conoces a todos, incluso los pensamientos de sus corazones. Tú conoces su lucha en la tierra y las tentaciones que los rodean. Ayuda a cada uno, incluso a los que todavía están lejos de ti. Dales corazones dispuestos para tu Palabra y para todo lo que has prometido. Nos encomendamos a tu cuidado en esta noche. Ayúdanos y bendícenos. Que se haga tu voluntad en todas las cosas, incluso en medio de todo pecado y sufrimiento en el mundo. Que se haga tu voluntad en la tierra como en el cielo, y que venga tu reino. Amén.
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