Oración diaria para el 13 de julio


Queridos hermanos, ahora somos hijos de Dios, pero todavía no se ha manifestado lo que habremos de ser. Sabemos, sin embargo, que cuando Cristo venga seremos semejantes a él, porque lo veremos tal como él es. 1 Juan 3:2

Señor nuestro Dios poderoso, considéranos en nuestra pobreza, porque nos llamas tus hijos y nos das de tu Espíritu. De tu plenitud, constantemente necesitamos recibir fortaleza para la lucha de la vida a la que estamos destinados. Concede que llegue luz, donde todavía reinan las tinieblas, especialmente donde está tan tenebroso que no sabemos adónde dirigirnos. Escucha nuestra oración por todas las personas, y permite que solo tu justicia y tu verdad tengan la victoria. Que todos reciban lo que les has prometido, y permíteles entender que sin importar lo que pase, seguirán siendo tus hijos. Amén.

  • Evangelio

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