Llegarán días —afirma el Señor—, en que cumpliré la promesa de bendición que hice al pueblo de Israel y a la tribu de Judá. Jeremías 33:14
Señor nuestro Dios, que tu gracia reine en nuestros corazones y tu amor llegue a nosotros como realización gloriosa de tu promesa de bendición, para que en nuestro tiempo tengamos comunión unos con otros, para alabarte y adorarte. Entonces seremos un pueblo que te pertenece y recibe tu ayuda. Oramos para que bendigas tu Palabra dentro de nosotros. Enséñanos una y otra vez cómo guardar tu Palabra, cómo ser tus hijos en hechos y en verdad. Que recibamos fortaleza de corazón, siempre que experimentemos una gran aflicción. Permite que tu voluntad se revele en todas partes; permite que toda la humanidad conozca que tú reinas, que nos ayudas y estarás con nosotros por toda la eternidad. Porque has escrito nuestros nombres, y deseamos estar contigo, Padre celestial. No deseamos nada más que ser tus hijos en este mundo, ser hijos bajo tu cuidado por toda la eternidad. Amén.
Hermanos míos, ustedes deben tenerse por muy dichosos cuando se vean sometidos a pruebas de…
El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes pastos me hace descansar. Junto…
Te exaltaré, mi Dios y rey; por siempre bendeciré tu nombre. Todos los días te…
El día de ayer, el mundo fue testigo de un hecho histórico: un nuevo acuerdo…
En el transcurso de este año, California ha enfrentado una de las temporadas de incendios…
“Rvdo. Clarence L. Jordan muerto. Dirigió el Proyecto Granja Interracial”, se leía en un breve…