Porque lo dice el excelso y sublime, el que vive para siempre, cuyo nombre es santo: «Yo habito en un lugar santo y sublime, pero también con el contrito y humilde de espíritu, para reanimar el espíritu de los humildes y alentar el corazón de los quebrantados». Isaías 57:15
Amado Padre que estás en el cielo, te damos gracias porque aun en la necesidad y la miseria sentimos y sabemos que tú estás con los débiles, porque eres poderoso ayudando a tus hijos. Tú le das fuerza al débil para servirte, a pesar de todas sus faltas y debilidades. Danos alegría de corazón por todo lo que podamos hacer y experimentar, porque te sirve a ti, a tu gloria y a tu reino hasta el día cuando otros también reciban la vista para ver. Amén.
El Señor es mi pastor, nada me falta; en verdes pastos me hace descansar. Junto…
Te exaltaré, mi Dios y rey; por siempre bendeciré tu nombre. Todos los días te…
El día de ayer, el mundo fue testigo de un hecho histórico: un nuevo acuerdo…
En el transcurso de este año, California ha enfrentado una de las temporadas de incendios…
“Rvdo. Clarence L. Jordan muerto. Dirigió el Proyecto Granja Interracial”, se leía en un breve…
Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedir, pero…