La tierra dará entonces su fruto, y Dios, nuestro Dios, nos bendecirá. Dios nos bendecirá, y le temerán todos los confines de la tierra. Salmo 67:6-7

Señor nuestro Dios, bendícenos, para que el mundo sea bendecido. Ayúdanos, para que el mundo entero sea ayudado. Concédenos tu misericordia en Cristo Jesús, quien dio su vida por el mundo entero. Que se revele pronto que tu reino permanece y traerá fin a nuestra era, un final bueno y bendito. Concédenos tu bendición en cada aspecto de nuestras vidas, en todas las preocupaciones y peticiones que tengamos en nuestros corazones, y ayúdanos a alabarte y darte gracias cada día. Permite que tu voluntad se conozca en todas partes, a pesar de horrores y blasfemias, para que incluso los moribundos te glorifiquen y todos los que tienen que sufrir te alaben y te den gracias, porque ven tu rostro y reconocen tu luz. Señor Dios, queremos encomendar todo a ti. Te esperamos, nos regocijamos y te agradecemos, porque sabemos que se hará tu voluntad. Sabemos y creemos que tu nombre será glorificado. Amén.