Por el contrario, ustedes se han acercado al monte Sión, a la Jerusalén celestial, la ciudad del Dios viviente. Se han acercado a millares y millares de ángeles, a una asamblea gozosa, a la iglesia de los primogénitos inscritos en el cielo. Se han acercado a Dios, el juez de todos; a los espíritus de los justos que han llegado a la perfección; a Jesús, el mediador de un nuevo pacto. Hebreos 12:22-24a
Señor nuestro Dios, te damos gracias por habernos redimido y poder sentirnos unidos con tus santos, los que en el cielo y en la tierra están reunidos en torno a Cristo Jesús, un pueblo que aumenta en número y fuerza año tras año. Te agradecemos que también nosotros pertenecemos a tu pueblo, y te pedimos que mantengas nuestros corazones conscientes de esta unidad, para que seamos personas felices, redimidas, que encuentran una liberación cada vez mayor, llenas de alabanza y agradecimiento, llenas de certeza y alegría. Concédenos esto, porque somos tu pueblo, nacido de tu poder como Salvador y reunido por causa de tu reino. Protege tus dones y poderes en nosotros. Continúa tu redención en el mundo entero, hasta inundar de alegría todo nuestro ser. Amén.