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Una iglesia situada en el centro de África sufrió una invasión, hace unos días durante su participación en una campaña de oración y ayuno de 21 días. Sin embargo, una intervención milagrosa de Dios había librado a los cristianos de algo fatal y poner sus vidas en riesgo.

El pastor Musthafa lideró el tercer día de la campaña de oración en la Asamblea Amar a Dios Iglesia, que contó con la participación de los 40 fieles – en su mayoría de mujeres.

De acuerdo con informes de los misioneros Minoo Hussain, la organización Biblias para Medio Oriente, el pastor y la mayoría de los cristianos en esta iglesia han sido seguidores del Islam.

Antes de comenzar la oración y el ayuno campaña dentro de la iglesia, el pastor y su personal Musthafa audazmente invita al barrio musulmán de ser parte de las reuniones y aprovechar la oportunidad para evangelizarlos.

Enfurecido por la actitud de la evangélica, los líderes musulmanes formaron un grupo de unas 30 personas para atacar a la iglesia. Al grito de "Allahu Akbar", los extremistas irrumpieron en el salón de la iglesia y destruyeron su estructura.

El pastor Musthafa sufrió una lesión en el cuello con la espada de uno de los musulmanes. Sin embargo, considera un hombre invisible delante de la espada. Se informa que esta persona invisible que parecía ser un ángel guerrero, dice Hussain misionera.

Incapaz de mantener su ataque compostura, el extremista terminó perjudicando con su propia espada. Los atacantes ahora pálida, continuarán un golpe a los cristianos.

Inesperadamente, se formó una fuerte tormenta alrededor de la iglesia. Grandes gotas de lluvia cayeron sobre extremistas como rocas, causando un gran desorden entre ellos. Sin embargo, los cristianos se mantienen secos y protegidos de la tormenta.

Todo el mundo pudo ver que una gran nube protegida contra los fieles de la lluvia. Cristianos vieron a Jesucristo en la nube y se puso de rodillas, exclamando: “aleluya”

“Como siempre con nuestro Dios, el milagro fue notable por el hecho de que la región está casi seco. El suelo se haBIa absorbido toda el agua que se necesita ”, dice Hussain misionera.

Al ver que los cristianos estaban protegidos de la tormenta, los musulmanes intentaron huir en busca de refugio. Sin embargo, fueron alcanzados por piedras de granizo aún más el dolor que causó las gotas de lluvia intensa.

Tratando de escapar, sus piernas atascadas en el lodo intentaron por tierra. La lluvia cayó solo en las cercanías de la iglesia, y se propaga a otras áreas de la región.

En pocos minutos, la lluvia se detuvo y la nube desapareció. Los cristianos estaban maravillados de la intervención milagrosa de Dios y se mantuvieron en ayuno y oración por toda la tarde, sentado en las ruinas de la iglesia.

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