– Ad –
Apartado por su familia por convertirse Cristo, el ex musulmán predico el evangelio en las calles por mas de 7 años. “Sentí un gran deseo de que otras personas experimentaran el amor de Dios, algo que yo experimenté”, comentó.
Kassim Kavuma, se convirtió al cristianismo en una campaña evangelística y ahora predica el Evangelio en las calles de Kampala, capital de Uganda, África.
Todos los días a las 3 de la tarde, Kassim sale a las concurridas calles de Kampala para anunciar la buena nueva del Evangelio que una vez le llegó. Prepara una mesa con libros cristianos para obsequiar y un altavoz con micrófono para la predicación.
En medio del ruido de la ciudad, llena de taxis, tráfico denso y aceras abarrotadas, Kassim proclama la Palabra, suplicando a los transeúntes que se arrepientan y acepten a Jesús como Señor y Salvador de sus vidas.
Sin importar que piensen de él, Kavuma lee versículos de su maltrecha Biblia con la facilidad de un predicador experimentado. El evangelista lleva 7 años predicando en las calles de Kampala.
Su conversión fue en el año 2014. Kassim creció en una familia musulmana y había asistido a una madraza (escuela islámica) donde aprendió el Corán con un maestro islámico. Pero un día, mientras regresaba a su hogar, escuchó oraciones cristianas en una cruzada.
“Todavía recuerdo ese día vívidamente. Estaba a punto de tomar un taxi cerca de Nakivubo para ir a casa cuando escuché las oraciones. Luego fui guiado por el Espíritu para escuchar lo que estaban predicando”, dijo Kavuma a Uganda Christian News.
“Hubo un poco más de claridad y luz cuando el predicador habló en el escenario. Todo lo que se decía era como si me estuvieran hablando directamente a mí. Cuando llamaron a la gente para que se salvara, me encontré allí para nacer de nuevo”.
El ex musulmán aceptó a Jesús, pero sabía que enfrentaría la oposición de su familia islámica, por lo que no regresó a casa ese día.
“Sabía lo que acababa de pasar, no podía irme a casa. Dormí allí, en el lugar donde se desarrolló la campaña. Y al día siguiente, fui con otros cristianos a la montaña de oración en Sseguku”, recordó Kavuma.
ÚNETE A NUESTRO GRUPO DE TELEGRAM PARA MANETER INFORMADA A LA COMUNIDAD CRISTIANA EVANGELICA.
“Desde ese momento que fui salvo, he experimentado un gran amor en mí. Estaba adorando a Dios en espíritu y en verdad y sentí ese gran deseo de que otras personas experimentaran lo que yo estaba experimentando”, dijo el ex musulmán.
Incluso desterrado de su familia, Kassim logró ganar a algunos familiares para Cristo. “Dos de mis hermanos ahora también son cristianos nacidos de nuevo. Creo que también se nos unirán otros miembros de mi familia”, testificó el evangelista.
– Ad –