Agencia AJN.- El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó que los debates internos en curso en la sociedad israelí no impedirán que el país responda con firmeza y de manera significativa a la escalada de violencia.
Al inicio de una reunión de emergencia del gabinete de seguridad en Jerusalem, tras el lanzamiento de cohetes desde Líbano, Netanyahu aseguró que en los últimos días dejó muy claro a los enemigos de Israel que «el debate interno entre nosotros no nos impedirá actuar contra ellos en cualquier lugar y en cualquier momento. Todos -sin excepción- estamos unidos en esto».
Con respecto a la situación en la Cúpula de la Roca, el premier israelí reiteró que el Estado judío no tiene «ninguna intención de cambiar el statu quo en el Monte del Templo: pedimos que se calmen las tensiones y actuaremos con firmeza contra los extremistas que despliegan allí la violencia».
En relación a la escalada de violencia tras el lanzamiento de cohetes desde el Líbano, Netanyahu expresó que Israel »devolverá el golpe a nuestros enemigos, y pagarán el precio de cada acto de agresión».
»Nuestros enemigos volverán a aprender que, en tiempos de guerra, los ciudadanos israelíes permanecen juntos y unidos, y apoyan las acciones de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) y del resto de las fuerzas de seguridad para proteger a nuestro país y a nuestros ciudadanos», concluyó Netanyahu.
Reunión de emergencia del gabinete de seguridad en Jerusalem.
El dilema de Israel: ¿Cómo responder en El Líbano sin que Hezbollah ingrese en los enfrentamientos armados?
El tema central a tratarse en el Gabinete de Defensa será cómo responder en territorio libanés, evitando que Hezbollah se vea arrastrado a la escalada. Esta situación podría desencadenar en un enfrentamiento regional total.
Segunda Guerra del Líbano
El 24 de mayo del 2000 Israel completó su retirada del sur del Líbano. Al no desplegar tropas el Ejército libanés por parte del Gobierno de ese país, fue Hezbollah quien tomó el control absoluto de la zona a lo largo de la frontera, con ayuda de Siria e Irán.
Según Hezbollah, pese a la retirada israelí, Jerusalem continuaba ocupando territorio libanés al poseer las Granjas de Shebaa, por lo que veía así justificada su lucha contra el Estado hebreo. Fue así que en octubre del mismo año de la retirada la organización chií secuestró tres soldados israelíes. Los mismos fueron devueltos posteriormente muertos en un intercambio pactado entre las partes.
La postura del presidente Herzog
El presidente de Israel, Isaac Herzog, señaló que »se tomarán las medidas necesarias para garantizar la seguridad de sus ciudadanos».
Herzog también pidió a la comunidad internacional que condene el reciente lanzamiento de cohetes desde el Líbano.
«El Estado de Israel actuará a todos los niveles para mantener su seguridad y la de sus ciudadanos. Exijo que la comunidad internacional condene enérgicamente la flagrante violación del derecho internacional, para no dar apoyo al terrorismo y a la lesión de personas inocentes», subrayó Herzog.
El presidente añadió que habló con funcionarios locales del norte y el sur del país, y les ofreció su apoyo en nombre de toda la nación.
La palabra de Gantz
El ex ministro de Defensa de Israel y actual líder del partido Unidad Nacional, Benny Gantz, declaró que la oposición dará todo su apoyo al gobierno liderado por Netanyahu para responder a la escalada de violencia.
Con respecto al rol de Beirut, Gantz afirmó que »Líbano es responsable del lanzamiento de cohetes desde su territorio y asumirá las consecuencias».
